avivamientophilly

Picture of Pastora Claudia Londono

Pastora Claudia Londono

  • La familia y el hogar son sumamente importantes en el plan de Dios. En Deuteronomio 6:4-9, que nos instruye a amar a Dios y a enseñar Su Palabra en nuestros hogares. La responsabilidad de enseñar y modelar el temor de Jehová recae principalmente en la familia. La familia no es una invención humana, sino una idea maravillosa de Dios, y cada miembro tiene un rol específico que cumplir. Cuando estos roles se distorsionan, vemos maldición en lugar de bendición. La familia juega un rol crucial en la sociedad; una familia destruida resulta en una sociedad destruida. La ausencia de un padre afecta la identidad de los hijos. Un padre ausente deja a un hijo sin identidad, provisión y seguridad. Esto se refleja en la violencia y la desobediencia que vemos en la sociedad. La falta de un modelo a seguir en el hogar lleva a los hijos a buscar identidad en lugares equivocados, como la drogadicción y la delincuencia.

  • En el mundo moderno, la industrialización cambió la dinámica familiar. Antes, las familias trabajaban juntas en el hogar, y el padre era el líder espiritual. Sin embargo, con la industrialización, el padre se vio obligado a trabajar fuera del hogar, dejando a la madre con la responsabilidad de enseñar a los hijos. Esto ha llevado a una distorsión de roles, donde las mujeres han asumido roles que no les corresponden, y los hombres han abandonado su responsabilidad espiritual. La mujer, como ayuda idónea, tiene un rol crucial en la familia, pero no debe asumir el rol del hombre. La falta de visión y dirección en los hogares ha llevado a un desenfreno total. La historia nos muestra que las sociedades fuertes y prósperas se basaban en familias unidas y funcionales. La ausencia de padres en los hogares ha llevado a una crisis de identidad y moralidad en la sociedad.

    Como iglesia, sentimos una carga especial por los jóvenes y los niños. Nos comprometemos a orar y ayunar por la sanidad y restauración de nuestros hogares. Dios es experto en hacer de las ruinas una edificación completa. Aunque nuestras familias puedan estar quebrantadas, Dios puede restaurarlas. Oramos, para que nuestros hijos vuelvan a Dios y nuestros matrimonios sean restaurados.

Para no olvidar...


  • 1.  La familia no es una invención humana, sino una idea maravillosa de Dios. Cada miembro de la familia tiene un rol específico que cumplir, y cuando estos roles se distorsionan, vemos maldición en lugar de bendición. La familia juega un rol crucial en la sociedad; una familia destruida resulta en una sociedad destruida.

    2. Un padre ausente deja a un hijo sin identidad, provisión y seguridad. Esto se refleja en la violencia y la desobediencia que vemos en la sociedad. La falta de un modelo a seguir en el hogar lleva a los hijos a buscar identidad en lugares equivocados, como la drogadicción y la delincuencia. 

    3. La industrialización cambió la dinámica familiar, obligando al padre a trabajar fuera del hogar y dejando a la madre con la responsabilidad de enseñar a los hijos. Esto ha llevado a una distorsión de roles, donde las mujeres han asumido roles que no les corresponden, y los hombres han abandonado su responsabilidad espiritual. 

    4.  La mujer tiene un rol crucial en la familia, pero no debe asumir el rol del hombre. La falta de visión y dirección en los hogares ha llevado a un desenfreno total. La historia nos muestra que las sociedades fuertes y prósperas se basaban en familias unidas y funcionales.